La bioestimulación de cuello y escote es un tratamiento seguro y mínimamente invasivo que puede provocar, tras la sesión, picor, sensibilidad o ardor en la piel leves y transitorios.
No se recomienda realizar la bioestimulación durante el embarazo y durante el período de lactancia. También está contraindicado en presencia de enfermedades de la piel, así como enfermedades autoinmunes y colagenopatías. Se desaconseja la ingesta de anticoagulantes en los 7 días previos y postratamiento.
La mayoría de las contraindicaciones son enfermedades graves (trombocitopenia, insuficiencia renal o hepática, flebitis, gangrena, epilepsia, arritmias, insuficiencia cardiaca severa) o poco frecuentes de forma que la mayor parte de los pacientes pueden optar por este tratamiento.
Es un tratamiento seguro, de rápida aplicación y no requiere tiempo de inactividad, lo que significa que puedes retomar tus actividades cotidianas de inmediato.
En las primeras 12-24 horas es normal notar una formación de pequeñas ronchas que desaparecen espontáneamente.
En ocasiones, durante unos días después del tratamiento, puede ocurrir en las áreas tratadas: enrojecimiento, hinchazón, sensibilidad y picazón.